La higiene en los centros de fisioterapia no solo ayuda a garantizar el bienestar del paciente y los trabajadores, sino que también ayuda a prevenir infecciones nosocomiales.

 

 

Los centros de fisioterapia o de rehabilitación reciben a decenas de pacientes al cabo del día y, algunos de ellos, presentan un estado de salud algo delicado.

Es por eso que, aunque estos centros no se consideran de tan alto riesgo como los hospitales, también presentan unas necesidades de higiene muy concretas y diferentes a las de cualquier otro espacio.

En esta guía destacamos los puntos básicos y los productos necesarios para garantizar la higiene en los centros de fisioterapia y el bienestar, no solo de los pacientes, sino también de los profesionales.

 

 

La higiene de manos, básica para evitar las infecciones nosocomiales

Las manos de los fisioterapeutas son su principal herramienta de trabajo. Y de ahí que corran el riesgo de convertirse en un vehículo para la transmisión de gérmenes.

Es especialmente importante que los profesionales de la fisioterapia laven sus manos con agua y con jabón antes y después de recibir a cada paciente.

Además, también puede completarse el lavado de manos con la aplicación de gel hidroalcohólico Purell para una desinfección completa.

Esta acción aporta mayor seguridad al paciente y también a los trabajadores.

Crema Hand Medic para la hidratación de las manos

Un fisioterapeuta lava sus manos muchas veces al cabo del día. Esto, sumado al desgaste que éstas sufren durante toda la jornada de trabajo, acostumbra a derivar en un desgaste de la piel.

La crema acondicionadora Gojo Hand Medic cuenta con triple función: repara, hidrata y protege las manos.

Se recomienda aplicar la crema con frecuencia, no solo para calmar e hidratar la piel, sino también para protegerla de agentes externos, ya que Hand Medic actúa como barrera.

Una de sus principales ventajas es que no deja sensación de grasa después de haberla aplicado.

El papel camilla, el rey de la consulta

El papel camilla suele ser uno de los productos de higiene más demandados en una consulta o centro de fisioterapia.

Este elemento, que actúa a modo de protección, es totalmente necesario e imprescindible, ya que evita que la superficie de la camilla se manche o contamine y derive en problemas mayores para los pacientes.

Se considera estrictamente necesario sustituir cada pieza de papel camilla cada vez que se cambie de paciente.

En este artículo puedes consultar algunas pautas que te ayudarán a elegir papel camilla.

Celulosa suave y absorbente para el cuerpo

 

 

Los fisioterapeutas trabajan con geles y cremas que se aplican sobre el cuerpo de los pacientes y que acostumbran a dejar una sensación de grasa posterior.

Por ello es habitual verlos retirar estos restos con celulosa. Se recomienda utilizar papeles con gran absorción y especialmente suaves para evitar irritaciones en la piel que provoquen que el paciente se sienta incómodo.

¿Cómo sabemos cuando un papel es absorbente? El número de capas juega un papel importante, pero no es el único factor a tener en cuenta, ya que también interviene el gramaje que presenta cada capa en concreto. Cuanto mayor sea el gramaje y el número de capas, más absorbente y resistente será el papel. 

Para garantizar la suavidad de la celulosa, optaremos por composiciones de fibra virgen en vez de papel reciclado y, a poder ser, con acabado tisú.

Equipa el centro con las papeleras adecuadas

Como observamos, si sumamos el desecho de papel camilla con el de celulosa para el secado del cuerpo, un centro de fisioterapia genera muchos residuos al cabo del día.

Por ello, debemos contar con papeleras o contenedores lo suficientemente grandes para albergar tales cantidades. Pero, sobre todo, es importante que éstas presenten una apertura y estructura higiénicas.

Este hecho se traduce en que lleven incorporado un pedal para no tener que tocar la superficie al abrir la papelera, además de una tapa, para que los desechos de papel usados queden «protegidos» y no supongan un riesgo en cuanto a la contaminación del ambiente.

Guantes de nitrilo para una mayor resistencia

Algunas tareas que se llevan a cabo en los centros de fisioterapia o rehabilitación requieren el uso de guantes.

Este producto es especialmente útil cuando hay presencia de heridas, ya que evita el contacto directo con la piel pero sin perder apenas sensibilidad.

Históricamente, los guantes de látex eran la opción más utilizada gracias a su flexibilidad, pero se ha ido limitando su uso porque pueden provocar alergias o irritaciones en la piel.

Los guantes de nitrilo son la mejor alternativa: son más resistentes, hipoalergénicos e igualmente flexibles.

Desodorizante Microdor para la contaminación odorífera

La contaminación odorífera también puede ser un factor común en los centros de fisioterapia.

El desodorizante Microdor es la mejor opción para acabar con los malos olores en los centros de fisioterapia de forma natural.

Su composición en base a enzimas naturales desintegra los malos olores, en vez de enmascararlos como hacen los ambientadores.

Además, sus niveles de toxicidad son muy bajos, de forma que no incide negativamente en el bienestar de los pacientes ni de los trabajadores.

Si necesitas más información sobre la higiene en los centros de fisioterapia, rellena nuestro formulario de contacto ubicado en la barra lateral y uno de nuestros expertos te asesorará.