La limpieza y desinfección en ambulancias debe ser un proceso rápido y eficaz para garantizar la seguridad de los pacientes que se atienden.
Las ambulancias o transporte sanitario transportan diariamente a personas enfermas que pueden haber sufrido accidentes o que han adquirido algún tipo de enfermedad infecciosa.
Para garantizar la seguridad del personal sanitario que viaja en la ambulancia y la de los propios pacientes, debemos recurrir a una limpieza y desinfección que garanticen la total eliminación de microorganismos o fluidos de carácter infeccioso.
A continuación, destacamos algunos protocolos de limpieza que deben seguirse para asegurar que las ambulancias están disponibles en el menor tiempo posible y en condiciones óptimas para su uso.
Principios básicos para la limpieza y desinfección en ambulancias
Para realizar la limpieza en una ambulancia deben seguirse las siguientes normas:
- Sacar los objetos de metal y tratarlos aparte para evitar su oxidación.
- Lavar el material de limpieza con agua y detergente y reemplazarlo cuando sea necesario.
- Considerar las normas de bioseguridad para minimizar riesgos.
- Ventilar la ambulancia, abriendo las puertas y ventanas durante unos 15-30 minutos en un lugar exterior y poco transitado.
Para la desinfección consideraremos tres opciones posibles en función del nivel de riesgo de infección:
- Las superficies críticas como, por ejemplo, el material quirúrgico, se desinfectarán mediante esterilización.
- Las superficies semicríticas como, por ejemplo, los equipos de intubación, serán tratados mediante desinfección de alto nivel.
- Las superficies no críticas, como es el caso de las cuñas o el fonendoscopio, se intervendrán con una desinfección de nivel intermedio.
Limpieza y desinfección del interior de la ambulancia
Para proceder con la limpieza del interior de la ambulancia debemos retirar previamente todos los objetos móviles.
A continuación, se limpiará el suelo, techo y demás superficies con mopas o paños de tejido no tejido impregnados en una solución de agua y detergente.
Las superficies metálicas serán aclaradas con agua y secadas inmediatamente para evitar su oxidación.
La desinfección se realizará teniendo en cuenta la clasificación del punto anterior. Se tratarán todas las superficies de la ambulancia, incluidos los asientos y cinturones del conductor y copilotos.
Una vez se haya procedido con la limpieza y desinfección debemos esperar unos 30 minutos antes de permitir el acceso de personas al interior de la ambulancia.
Limpieza y desinfección de los aparatos médicos
Los aparatos médicos serán tratados igualmente con una solución de agua y detergente durante unos cinco minutos y serán posteriormente aclarados con un paño húmedo.
Todos aquellos aparatos médicos que necesiten ser esterilizados se retirarán en una bolsa adecuada para ser tratados en un espacio destinado exclusivamente a la esterilización.
Con la finalidad de dejar la ambulancia provista del material necesario para el próximo servicio, se sustituirán éstos por aparatos recién esterilizados o nuevos.
Aquellos aparatos médicos considerados como críticos como, por ejemplo, el fonendoscopio, serán desinfectados con alcohol a 70º.
Limpieza y desinfección de la camilla
Para llevar a cabo la higiene de la camilla, probablemente el elemento que establece mayor contacto con el paciente, debemos retirar la sábana y guardarla en una bolsa adecuada.
La superficie de la camilla será lavada con detergente líquido, incluidas las barandillas, los cinturones de seguridad y las patas.
Se dejará actuar esta solución durante unos 5 minutos y se aclarará con un paño humedecido un mínimo de tres veces.
Para la desinfección, emplearemos una solución clorada o en base a amonios y la dejaremos actuar durante 10 minutos.
En el caso de que utilicemos hipoclorito sódico, aplicaremos un paño humedecido para evitar la oxidación.
Finalmente, se colocarán las sábanas y mantas limpias para cubrir el siguiente servicio.
Limpieza y desinfección del mobiliario de la ambulancia
Los cajones, lámparas y dispensadores de papel y jabón también forman parte de la ambulancia y, por lo tanto, también responden a un protocolo de limpieza y desinfección concreto.
En general, el mobiliario se limpiará con una solución detergente, se aclarará con un paño húmedo y se desinfectará con hipoclorito sódico o alcohol a 70º en función del nivel de riesgo infeccioso que presente.
Por lo que respecta a los dispensadores de jabón, éstos deben ser desmontados para una limpieza más completa y, en caso de que se considere necesario, se enviarán a la central de esterilización.
Por supuesto, el material desechable será recogido en una bolsa adecuada y será sustituido por material nuevo.
La limpieza y desinfección en ambulancias minimiza los riesgos de que el estado del paciente se agrave o de que, su estancia en el medio hospitalario se prolongue.
Además, también sirve para cubrir la seguridad de los trabajadores de la ambulancia.