El jabón a granel es susceptible de presentar contaminación bacteriana, convirtiendo la higiene de manos en una acción contraproducente.

 

 

En artículos anteriores argumentábamos por qué el jabón en carga es mejor que el jabón a granel. Pero no hablábamos de cómo se contamina el jabón en formato granel.

Todos utilizamos el jabón de manos, no solo para eliminar restos de suciedad, sino también para reducir la presencia de gérmenes.

De forma que, si el jabón se convierte en una fuente de contaminación, la acción de lavarse las manos es contraproducente.

 

 

Un breve repaso sobre el jabón a granel

 

 

El jabón a granel es una solución líquida o en espuma que se coloca añadiendo directamente el producto al dispensador.

A diferencia de las cargas de jabón, éste no viene contenido en un cartucho y, al colocarlo en el dispensador, se impregna por todas sus paredes.

Es importante tener esto en cuenta porque, en caso de que el dispensador esté contaminado y no se limpie y desinfecte, puede contaminar al jabón y viceversa.

Es importante limpiar y desinfectar los dispensadores de jabón a granel periódicamente para evitar problemas de contaminación cruzada.

¿Es el jabón a granel una fuente de contaminación?

En 2007, un estudio no publicado de la Universidad de Arizona afirmaba que el 25% de los dispensadores que se rellenaban con jabón a granel presentan contaminación bacteriana.

Dicho estudio destaca, además, que el 16% de los gérmenes encontrados son causantes de enfermedades gastrointestinales. Y que, en definitiva, al lavar nuestras manos con jabón a granel, adquirimos, de media, más de un millón de bacterias.

Al realizar la misma prueba con sistemas de jabón en carga no se detectó contaminación bacteriana.

¿Cómo se contamina el jabón a granel?

 

 

Como comentábamos, el jabón a granel está abierto al ambiente. Los gérmenes se reproducen en el interior del dispensador y se impregnan tanto en sus paredes como en el jabón presente.

La realidad es que cada vez que el personal de limpieza rellena los dispensadores de jabón, no se detiene a limpiarlos ni a desinfectarlos. Así, el nuevo jabón que se añade queda contaminado por el antiguo.

El resultado es que cuando los usuarios dispensan el jabón pensándose que están lavando sus manos, en realidad las están contaminando.

Las cargas de jabón son la mejor alternativa al jabón a granel, ya que vienen herméticamente cerradas. Además, deben ser vistas como una inversión y nunca como un gasto ya que, a la larga, resultan mucho más rentables por tres motivos: optimizan el consumo de producto, reducen riesgos y evitan el derroche.

Si quieres información sobre el jabón en carga contacta con nosotros a través del formulario que aparece en la barra lateral y te asesoraremos.