Cada vez son más las medidas de higiene que se implantan en los centros médicos y hospitales con el fin de reducir las infecciones nosocomiales o las infecciones asociadas a la atención sanitaria. ¿Pero la sanidad ha sido siempre así? Lo cierto es que no.  

Fue Florence Nightingale quien, a finales del siglo XIX reveló que la higiene mejoraba la supervivencia de los enfermos de los centros médicos. Tras una reforma sanitaria, Nightingale consiguió que las medidas preventivas pasaran por delante de las medidas curativas.
Tal fue así que la mortalidad en los hospitales descendió de un 40% a un 2%.  

¿Cuáles son las principales diferencias entre la sanidad de hace 50 años a la de ahora? 

1) Antes se reutilizaban todos los instrumentales, “esterilizándolos” con agua hirviendo. Ahora se utilizan materiales fungibles 

2) Hace 50 años se “esterilizaban” las gasas todas juntas quedando limpias, pero no estériles en realidad. Actualmente ya vienen esterilizadas en paquetes sellados. 

3) A diferencia de años atrás, ahora se higieniza a los pacientes a diario y se cambian las sábanas con la misma frecuencia.  

4) El material quirúrgico ha pasado a ser fungible en vez de lavable y reutilizable como era antes. 

Otro de los elementos que más ha fomentado la higiene en sanidad es la introducción del papel camilla, que se reemplaza con cada paciente nuevo. Aun así, aún queda mucho camino por recorrer hasta hacer casi desaparecer las infecciones nosocomiales.