Las certificaciones medioambientales nos dan información acerca de la materia prima o proceso de fabricación de los productos de papel.
La preocupación por el medio ambiente es cada vez más creciente. Y esto provoca que, a la hora de elegir determinados productos, acabemos decantándonos por las opciones menos contaminantes o que generen un menor impacto con nuestro entorno natural.
Por ello, a la hora de elegir productos de papel o celulosa, exigimos saber de dónde procede la materia prima o conocer el proceso de fabricación al que se someten estos productos.
Y es que, años atrás, los productos de papel no estaban precisamente bien vistos por lo que a ecología se refiere.
Actualmente, disponemos de diferentes tipos de papel y de varias certificaciones capaces de revelarnos una gran cantidad de información.
A continuación, repasamos las principales certificaciones que existen para cada tipo de papel.
- Sobre la tala controlada y la reforestación
- Certificaciones que hacen referencia a la materia prima
- Certificaciones que hacen referencia al proceso de fabricación
- Certificaciones medioambientales genéricas para el papel
- Certificaciones que hacen referencia a la empresa productora
- ¿De qué certificaciones medioambientales disponemos en Papelmatic?
Sobre la tala controlada y la reforestación
A lo largo de la historia y hasta hace relativamente poco, se consideraba a la industria papelera responsable de la deforestación y de otros males que sufre el medio ambiente.
Pero el tiempo y los hechos han demostrado que se puede fabricar papel y, a la vez, ser respetuoso con el entorno natural.
Una de las acciones que ha ayudado a reafirmar esto es la implantación de políticas sostenibles como, por ejemplo, la reforestación o la tala controlada.
Hoy en día, es posible extraer el 100% de la materia prima del papel de bosques certificados, que ejercen un control sobre la tala y plantan un volumen considerable de árboles por cada árbol que se tala.
Certificaciones que hacen referencia a la materia prima
Los sellos FSC (Consejo de Administración Forestal) y PEFC (Programa para el Reconocimiento de Certificación Forestal) garantizan que la materia prima del papel proviene de bosques certificados y, por tanto, sostenibles.
Los bosques certificados, como comentábamos en el punto anterior, contemplan acciones como, por ejemplo, la tala controlada o la reforestación.
La diferencia entre ambos reconocimientos es que son gestionados por entidades distintas.
Certificaciones que hacen referencia al proceso de fabricación
Los sellos ECF (Libre de Cloro Elemental), TFC (Totalmente Libre de Cloro) y PCF (Procesado Libre de Cloro) nos dan información sobre los procesos a los que ha sido sometido el papel durante su fabricación.
Por ejemplo, la certificación ECF garantiza que el papel ha sido blanqueado en ausencia de cloro líquido; la certificación TFC asegura que el papel se ha producido sin emplear cloro de ningún tipo y la certificación PCF nos informa de que, durante el último ciclo de producción, no se ha usado cloro.
Certificaciones medioambientales genéricas para el papel
Además de las certificaciones que hacen referencia a la materia prima y al proceso de fabricación, existen sellos que contemplan ambos parámetros.
Es el caso de la certificación Blue Angel (Ángel Azul), un reconocimiento de origen alemán, que indica que el 100% de la materia prima del papel es reciclada y ha sido sometida a un proceso de fabricación libre de cloro y con una cantidad mínima de productos químicos.
Este grupo también lo conforma la certificación Nordic Swan (Cisne Nórdico), un sello de origen escandinavo que nos informa de que, como mínimo, el 20% de la fibra virgen que se ha usado para fabricar el papel proviene de bosques certificados. Además, esta certificación no admite el uso de cloro y restringe la aplicación de productos químicos durante la producción.
Por último, la etiqueta Ecolabel, que es conocida por ser el sello ecológico oficial de la Unión Europea, indica que, como mínimo, un 10% de la fibra virgen del papel proviene de bosques certificados, restringe las emisiones y tampoco tolera el uso de cloro.
Certificaciones que hacen referencia a la empresa productora
La norma internacional ISO 14001 certifica y reconoce la calidad en los Sistemas de Gestión Ambiental.
En el caso de la celulosa, en concreto, sirve para certificar que la empresa productora de papel realiza una buena gestión medioambiental desde la adquisición de la materia prima, pasando por el proceso de producción, hasta la distribución de los productos resultantes.
¿De qué certificaciones medioambientales disponemos en Papelmatic?
En Papelmatic estamos certificados con la norma ISO 14001 y nos esforzamos para reducir las emisiones y el impacto que genera nuestra actividad con el medio ambiente.
Toda la celulosa con la que trabajamos proviene de bosques certificados.
Así, podemos garantizar que nuestros productos cuentan con los reconocimientos ECF, TFC, PCF y Ecolabel, entre otros.
Puedes consultar nuestras certificaciones en el apartado de RSC y Medio Ambiente de nuestra página web.