Las toallas de papel cortadas se presentan en servicios individuales que evitan el contacto con el resto de producto y así, evitan también la contaminación cruzada, convirtiéndose en un producto más higiénico que las bobinas de celulosa.

 

La dispensación de celulosa en bobinas supone a menudo un ahorro dada su venta en cantidades industriales. ¿Pero es este sistema realmente higiénico? 

En otros posts, hablábamos de la importancia de utilizar dispensadores de grandes capacidades para la dispensación de estas bobinas ya que, así, evitamos la contaminación cruzada. 

Aun así, al no quedar cubierto el papel, se mantiene el riesgo de que se produzca este fenómeno. Es por eso que, en los entornos más críticos, se recomienda utilizar toallas de papel cortadas en su lugar. 

 

¿Cuáles son las ventajas de las toallas de papel cortadas frente a las bobinas industriales? 

 

  • Permiten una dispensación más segura. Quedan totalmente cubiertas por el dispensador y únicamente tocamos la unidad que se va a utilizar en ese momento.  
  • Optimizan el consumo. Al venir previamente cortadas, se evitan posibles abusos en el consumo.  
  • Ofrecen un aspecto más elegante y cuidado, transmitiendo así a los usuarios una mayor preocupación por la higiene.  

 

Como podemos ver, una de las principales ventajas es que se reducen considerablemente los riesgos de que se produzca contaminación cruzada. 

Únicamente debemos tener en cuenta la zona donde se va a colocar el dispensador de toallas cortadas y el uso que se le va a dar ya que, por ejemplo, en una planta de producción, las reposiciones estarían muy poco espaciadas entre sí, complicando así la faena de los operarios.