Quitarse los guantes de forma correcta es igual de importante que garantizar su uso en los momentos en los que existe riesgo de contagio.

 

 

Los guantes son una medida de protección que actúa como barrera entre el usuario y el entorno, en los casos en los que el usuario puede incidir negativamente en el espacio o viceversa.

En el caso de los ámbitos sanitarios, ambas opciones son posibles. Los guantes son una medida higiénica y una herramienta para la seguridad laboral al mismo tiempo.

Por ello, su correcta colocación es igual de importante que su desecho.

 

 

¿Por qué es tan importante desechar los guantes correctamente?

La retirada de los guantes después de una actividad sanitaria en un centro médico, hospital, clínica veterinaria o centro sociosanitario juega un papel crítico a la hora de evitar contagios.

Por norma general, usaremos guantes para evitar entrar en contacto con superficies que resultan contagiosas y peligrosas para la salud de las personas.

Durante la actividad, el guante se mezcla con miles de gérmenes procedentes de superficies muy diversas. Por ello, a la hora de retirarlo, es especialmente importante que éste no entre en contacto con la piel.

A continuación, mostramos los pasos para quitarse los guantes de forma segura.

Pasos para quitarse los guantes de forma segura

 

 

Paso 1. Agarra el guante por el lado de la palma y a la altura de la muñeca. Tira de él de forma que el guante, al retirarse, quede del revés.

 

Paso 2. Sostén el guante ya retirado con la plama de la mano donde todavía tienes puesto el otro guante. Introduce los dedos a la altura de la muñeca para retirar el otro guante, de forma que solo toque tu piel y la parte interior del guante.

 

Paso 3. Tira del guante hasta que quede del revés sin dejar de sostener el primer guante. Así, el guante que retiraste en primer lugar, quedará dentro de este segundo guante.

 

Paso 4. Desecha los guantes en el contenedor adecuado que, en este caso, es el de residuos sanitarios especiales y debe incorporar una bolsa de residuos GII.

La higiene de manos, imprescindible después de quitarse los guantes

Es imprescindible lavar las manos con agua y jabón inmediatamente después de haber retirado los guantes y antes de tocar otra superficie.

En ocasiones, se producen roturas imperceptibles o se abren pequeños poros en los guantes que inactivan su función.

También se recomienda que, después de haber lavado las manos con agua y con jabón, se aplique gel hidroalcohólico Purell para una desinfección completa.

 

Desde Papelmatic, siempre recomendamos el uso de guantes de nitrilo, que son igual de flexibles y muy resistentes a posibles roturas. Además, a diferencia de los guantes de látex, son hipoalergénicos.